Así lo indicó Martín Zurita, secretario ejecutivo de la Asociación de Institutos de Enseñanza Privada de Buenos Aires (AIEPBA), quien en febrero pasado había anticipado a este medio las proyecciones de los aumentos en los aranceles de los colegios, en el marco de la incorporación de los mismos al Programa de Precios Justos por parte del gobierno Nacional: “cuando firmamos en disconformidad el acuerdo, no es que éramos iluminados sino que conocemos la realidad del sector, y sabíamos que antes de las paritarias era imposible firmar y anticiparnos a algo, porque el 80% del componente de un arancel es el coso laboral”.
En ese sentido remarcó que los números obtenidos en la negociación salarial docente de febrero, estaban por arriba de los porcentajes de aumentos acordados entre el gobierno y los establecimientos educativos privados, generándose un desfasaje: “es por eso que desde los primeros días de marzo venimos solicitando la actualización de los aranceles que recién nos dieron para mayo, con lo cual las escuelas privadas con subsidio del Estado, van a registrar un aumento del 6,7%”, dijo Zurita que reclamó por el retroactivo desde marzo, aguardando una revisión de la situación por parte del gobierno.
El referente de AIEPBA también analizó la situación de los establecimientos educativos privados a la luz del complejo contexto económico y en un año eleccionario: “la vemos complicada, sobre todo porque hay una convocatoria la semana que viene, del Frente Gremial Docente para reabrir las paritarias, y si el gobierno concede otro aumento a los docentes a partir de junio, vamos a seguir corriendo detrás de lo que necesitamos aumentar y si hay un delay, nos suceda permanentemente lo mismo”, sostuvo. “En esa tardanza y en esos meses que transcurren sin otorgarnos lo que correspondería, salimos perjudicados y eso resiente la continuidad normal de los proyectos educativos y la reinversión que tenemos que hacer permanentemente en nuestras escuelas”, enfatizó el Secretario de AIEPBA.
De este modo, el Secretario Ejecutivo de dicha Asociación añadió que el valor del servicio educativo en todos los niveles sigue siendo bajo pese a los incrementos programados para junio y julio, asegurando que lo que se trata de mantener es un servicio educativo de calidad: “es por eso que insistimos en una actualización automática, de modo que si el Estado decide aumentar el sueldo a los docentes, tendría que permitirse también el traslado a cuotas, porque al depender de la voluntad del gobierno de turno, nunca se va compensando. Es la necesidad en definitiva de una suerte de cláusula gatillo para no quedar desfasados con los aranceles“, concluyó