Cómo está la investigación sobre el caso Maddie
El principal sospechoso de la desaparición de Maddie es Christian Brueckner, un ciudadano alemán de 44 años que se encuentra cumpliendo una condena en una cárcel alemana por tráfico de drogas. A principios de este año fue también conenado a 7 años por la violación de una mujer estadounidense de 72 años en Praia da Luz, ocurrida 18 meses antes de la desaparición de Madeleine.
Los detectives del caso indicaron que el hombre tiene 17 causas relacionadas con este delito, desde agresiones, robos y asuntos relacionados con drogas, hasta abuso sexual y violación. Su primera condena la recibió cuando tenía 17 años.
En enero de este año, el diario británico The Sun publicó que documentalistas y exinvestigadores que realizan un trabajo sobre el paradero de Madeleine McCan descubrieron “pruebas e indicios impactantes” contra Brueckner.
Durante la investigación del caso de Madeleine, la policía alemana encontró ropa de niños, así como imágenes y videos en la “guarida secreta” de Brueckner. Se trata de una antigua fábrica en ruinas situada en la ciudad de Neuwegersleben, al norte de Alemania.
Asimismo, se sabe que el sospechoso estuvo en ese lugar con su motorhome en 2007, el año en que desapareció Madeleine. En este vehículo también se pudo hallar gran cantidad de trajes de baño de niñas y, además, Brueckner decía que allí escondía “niños y drogas”.
La policía también efectuó excavaciones en un jardín obrero cerca de Hannover, las cuales están relacionadas con la investigación sobre el caso Maddie, según señaló Julia Meyer, portavoz de la fiscalía.
Hans Christian Wolters, el fiscal a cargo del caso, le envió una carta a los padres de Madeleine, donde les confirmó que poseen evidencia concreta de que fue asesinada, aunque aclaró que no puede revelar las causas del fallecimiento porque implicaría entorpecer la investigación.