Desde el pasado jueves, la ciudad de Necochea enfrenta una severa interrupción en el servicio de colectivos del transporte público de pasajeros. Esta medida se deriva de la falta de acuerdo entre las empresas de transporte y el gremio que representa a los choferes, la Unión Tranviarios Automotor (UTA). A pesar de los esfuerzos para llegar a un consenso, la situación continúa sin solución y se extenderá durante el fin de semana.
La noticia se dio a conocer tras una audiencia entre los representantes de la Compañía de Transporte Necochea y Micro Ómnibus Nueva Pompeya, las dos empresas responsables del servicio en el distrito, junto con dirigentes de la UTA. La audiencia fue mediada por el Ministerio de Trabajo de la provincia de Buenos Aires; sin embargo, no se alcanzó un acuerdo satisfactorio para ambas partes.
El conflicto se origina en la falta de pago del medio aguinaldo y las dificultades que enfrentan las empresas para abonar los salarios correspondientes al mes de diciembre. Según informaron fuentes locales, los empresarios no presentaron ninguna propuesta formal en la mesa de diálogo, lo que llevó al sindicato a decidir continuar con la retención de tareas iniciada el 9 de enero.
Los trabajadores se concentraron en la zona de calles 87 al 4200, entre 90 y 92, donde permanecieron en asamblea, recibieron el apoyo de dirigentes de la UTA de Mar del Plata y expresaron su malestar por la situación.
Las empresas, por su parte, argumentaron que no cuentan con recursos suficientes para hacer frente a los pagos pendientes, incluso con los subsidios enviados por el gobierno bonaerense.
En este contexto, está previsto un nuevo encuentro entre las partes el próximo martes en la delegación que preside Natalia Steffen, con la esperanza de llegar a un acuerdo que restablezca el servicio de colectivos en Necochea.