Si te gusta recorrer y disfrutar de los paisajes, gastronomía y costumbres de las diversas zonas de la provincia de Buenos Aires, hay varios destinos que reciben a sus visitantes con hermosas vistas y actividades. En el partido de Carlos Casares se encuentra Bellocq, un pueblo ideal para los amantes de la historia y la tradición.
La Subsecretaría de Turismo bonaerense recomienda conocer esta "localidad de menos de mil habitantes, entramada entre diagonales y monolitos fue fundada en 1912 por Maria Larramendy sobre las tierras de la estancia Santa María con el nombre Bellocq".
Este pueblo conserva la capilla Inmaculada Concepción, de estilo contextualista latinoamericano construida en 1914 por monjes benedictinos. Con una residencia monacal y un colegio al que llegaron seis monjes con el fin de evangelizar a la población posee una colección de dieciséis vitraux, del artista francés Henri Gesta de Tolousse.
Bellocq, un pueblo de ensueño en Carlos Casares.
Foto: Ezequiel Lanza.
¿Te gustaría conocer este destino tranquilo y rural? Al lado de la capilla que fue restaurada y conserva mobiliarios centenarios, en la residencia monacal funciona el Hospedaje San Benito: una forma diferente de alojamiento en contacto con el silencio, la espiritualidad y el entorno campestre.
Foto: Ezequiel Lanza.
En este momento del año, el aroma a manzanilla recorre todas las calles de pago. En el lugar se cosechan y se procesan estas plantas con florcitas de pétalos blancos y centro amarillo que se parecen a margaritas en miniatura. Son medicinales y se utilizan con fines terapéuticos.
Bellocq es un sitio perfecto para desconectar del agobio rutinario, leer libros, matear, compartir relatos y escuchar el canto de los pájaros entre la brisa del campo bonaerense. El pueblo también invita a visitar el Museo Sergio P. Ábalos, un edificio de 1940 con exposición de objetos y fotografías sobre los primeros pobladores y los almacenes de ramos generales “Gigli” y “Casa Elhelou” que datan de 1917.
Entre arboledas añosas también se pueden degustar las exquisitas elaboraciones caseras como su lemon pie o tarta de frutilla que son los productos más elegidos por sus clientes, de la panadería Madalmar, que desde hace 23 años mantiene sus puertas abiertas y en la actualidad, la atiende la hija de sus primeros dueños o aprovechar la cantina del Club Social Bellocq con una carta clásica de pastas, pizzas y hamburguesas.
Desde la Ruta Nacional N° 226 hasta el kilómetro 453 donde se encuentra la Estación Girondo y luego una vez allí nos encontraremos con un camino de 11 kilómetros más por la misma ruta. También, se puede acceder desde la Ruta Nacional N° 5 en el kilómetro 309 desde allí tendrán que recorrer 45 kilómetros pasando por las localidades de Cadret y Centenario.