miércoles 19 de junio de 2024 - Edición Nº2023

Notas de opinión

Arde la interna

En el PJ bonaerense empiezan a mirar mal a Fernando Gray

Desde el Justicialismo bonaerense temen que la alianza entre el intendente de Esteban Echeverría; Facundo Moyano, hoy aliado a Javier Milei; y Juan Zabaleta, hombre de confianza del desplazado de la conducción nacional del PJ, Alberto Fernández; ponga en peligro la unidad del partido.



El intendente de Esteban Echeverría, Fernando Gray, pierde cada vez más la confianza del Partido Justicialista (PJ). En esta oportunidad el mandamás se reunió con el dirigente gremial y político, Facundo Moyano, y el ex jefe comunal de Hurlingham, Juan Zabaleta,  en las oficinas de AUBASA con la excusa de hablar de corredores viales seguros, pero en el trasfondo se trató de un encuentro de tres dirigentes sueltos que pujan en la interna de un peronismo que busca reconstruirse.

Vale mencionar que los tres dirigentes son críticos de la conducción partidaria del peronismo y se encuentran alejados del kirchnerismo. Incluso el propio Gray fue quien pidió  la renuncia de Alberto Fernández y Máximo Kirchner a la presidencia del PJ nacional y provincial, luego de las elecciones presidenciales que tuvieron como resultado a Javier Milei al frente del Gobierno nacional.

“Tras la derrota del peronismo en las elecciones y sin un pronunciamiento o un gesto político de los órganos partidarios, corresponde que el presidente del PJ Nacional Alberto Fernandez y quien se arroga la presidencia del PJ bonaerense, Máximo Kirchner, presenten sus renuncias”, había posteado en sus redes sociales.

Un dato no menor es que además, desde el camporismo también le apuntaron al intendente por “poner” a su esposa, Magdalena Goris, como senadora provincial.

Bajo ese contexto, también se puso en contra a varios de sus compañeros de militancia en el reciente encuentro del PJ al apuntar directamente a La Cámpora y a Máximo Kirchner, dueño de una parte de las decisiones importantes en tiempos de cierre de listas: “Esto es una democracia, no una monarquía. El que quiere un lugar, que se lo gane como me lo gané yo. Acá no hay más lapicera. Porque en esta elección que pasó, no perdió ni Perón ni Evita, perdió una cúpula de dirigentes cerrada y mezquina que con lapicera y el dedo, y sin consultar a nadie, eligieron los candidatos sin escuchar a nadie. Así nos va”, manifestó.

La primera en responder fue la ex titular del ANSES Fernanda Raverta: “Es importante no generar el retroceso histórico que es cuando un militante usa en la palabra del enemigo la capacidad de señalar a otros militantes o a una fuerza política. Seamos serios y respetuosos. Cuando el proceso de estigmatización golpea, nos golpea a todos. Es mentira que en el peronismo se puede señalar a uno y no salpicar a los otros”.

En esa línea, la intendenta de Quilmes, Mayra Mendoza, sentenció: “Hay quienes vienen a buscar el aplauso y no reflexionan ni hacen un aporte serio al colectivo. Tienen una mirada individual y egocéntrica”, en clara referencia a Gray.

Por su parte, Facundo Moyano es otro de los dirigentes que insiste con un cambio de visión del peronismo, sobre todo en lo concerniente a la política laboral, y sostiene que es “intolerable” que el partido se mantenga en una misma posición. En cuanto a Zabaleta, quien nunca pudo recomponer su relación con el kirchnerismo, fue autocrítico al admitir que “dejamos un quilombo bárbaro”, en referencia al gobierno de Alberto Fernández, del que fue parte como ministro de Desarrollo Social. Además, expresa públicamente que en el peronismo se tiene que terminar "el dedo y la lapicera en una sola mano".

OPINÁ, DEJÁ TU COMENTARIO:

3