En declaraciones a un medio digital, el titular del gremio de Canillitas, Omar Plaini, se refirió al aumento de tarifas en la PBA y aclaró que los aumentos cuestionados como el del Inmobiliario Rural están direccionados a los “sectores más pudientes” y no atentan contra los sectores medios. “La extorsión es una línea permanente de este Gobierno nacional”, enfatizó.
En esa línea, cuestionó la ‘rebelión fiscal’ promovida por el presidente Javier Milei y el diputado nacional libertario José Luis Espert: “Es una irresponsabilidad invitar a una rebelión fiscal contra la gestión bonaerense”, dijo.
“Es una enorme irresponsabilidad, estamos hablando del Presidente de la Nación y el Presidente de la Comisión de Presupuesto de la Cámara de Diputados. Es antidemocrático y es propio de un país con un monarca. Llamar a una rebelión fiscal es una locura”, acusó.
En este contexto, el dirigente gremial consideró que “la democracia camina por una cornisa” ya que el Gobierno nacional “descalifica y agrede” a quienes no piensan como ellos. “Si la autoridad máxima del país se maneja de esa manera, qué podemos pedir más abajo. La realidad es que todo se vuelve mediocre, efímero y volátil. Vamos camino a que la protesta se incremente”, enfatizó.
Sobre el tratamiento del mega DNU en la Cámara de Diputados, Plaini deseó “que suceda lo mismo que en el Senado”, en tanto comentó que los legisladores del campo sindical “van a rechazar el DNU”.
Por otra parte, consultado por el plan antipiquete aplicado en cada protesta callejera, Plaini advirtió que “no hay política de ajuste que no criminalice la protesta” y estimó que “se va a agravar” ya que el mandatario “considera al Estado una organización criminal”.
Por último, explicó que “la CGT cuenta con un plan de lucha que va más allá de la situación coyuntural” y apuntó que “desde una movilización o una medida de acción directa, cualquiera es factible en este momento”.