La Aceitera Huanguelen, que se encuentra emplazada en el Parque Industrial de Bolívar desde el 2005, cerró en diciembre pasado y dejó en la calle a 22 familias.
Hace casi dos meses que la planta encargada de producir aceite de soja y expeller, bajó sus persianas por decisión de su dueño Daniel Vásquez, que aduce problemas económicos como consecuencia del aumento de los insumos y los tarifazos.
Desde el Municipio de Bolívar, que conduce Marcos Pisano, entregaron a los despedidos un subsidio el mes pasado y entablaron conversaciones con el propietario de la Aceitera Huanguelen. Hasta el momento, las conversaciones fueron infructuosas.
Este miércoles, los cesanteados tendrán una reunión en el ministerio de Trabajo de la Nación y esperan que se dicte la conciliación obligatoria para retomar a sus tareas en la planta.