
El presidente Alberto Fernández inauguró el 141° período de sesiones ordinarias del Congreso de la Nación, el último de los iniciados en su Gobierno desde diciembre de 2019. En ese sentido y adentrado en un nuevo año electoral, el discurso cargó el repaso y la defensa de su gestión, pero también y sin mediar tintas, puso el ojo crítico en la disputa con el Poder Judicial, alcanzando por momentos niveles de extrema tensión .
La vicepresidenta, Cristina Fernández de Kirchner, fue la encargada de los rigores formales del acto y de recibir al mandatario en la explanada del Palacio Legislativo de la avenida Entre Ríos, para luego escoltarlo al salón Azul del Senado para la firma del libro de actas. A diferencia de los tres años anteriores, Fernández de Kirchner estuvo acompañada por la nueva presidenta de la Cámara baja, Cecilia Moreau, y la presidenta provisional del Senado, Claudia Ledesma Abdala. En ese contexto, el presidente del interbloque del Frente de Todos en el Senado, José Mayans, celebró que, "por primera vez después del voto femenino, hay tres mujeres presidiendo".
Homenaje por los 40 años de Democracia
En la primera parte de su discurso, el mandatario nacional realizó un homenaje por los 40 años ininterrumpidos de de la democracia: “Argentina ha sostenido su institucionalidad, eso que era una utopía para mi generación, es un logro”, reconociendo además la tarea de dirigentes, defensores de los derechos humanos, artistas, científicos, y a las madres de Plaza de Mayo “que nos marcaron y marcan el camino”.
Fernández, y a propósito de la defensa de la democracia, también recordó el intento de asesinato de la vicepresidenta: “vuelvo a exigir a la Justicia que profundice la investigación del hecho. (…) Le pido a la justicia que actúe con la misma premura con la que archiva causas en las que jueces y funcionarios asoman como imputados”, lanzó en un primer embiste a la Justicia.
“Yo, el moderado”
Alberto Fernández hizo un apartado para analizar lo que consideró una “sistemática acción de desinformación”, a partir del “cerco informativo difícil de eludir dado el sistema de concentración que existe”, asegurando que esos conglomerados mediáticos “ocultan o desinforman los discursos”. No obstante aseguró que en su gestión: “nadie ha sido censurado o callado sobre sus expresiones, y sin embargo hemos visto la tergiversación de la realidad” (…) con “argumentos intelectualmente deshonestos y cargados de odio que en nada contribuyen.,
En ese aspecto, el jefe de Estado se defendió de las críticas a su gestión: “escuché como criticaban mi moderación”, dijo y aseguró que con su “moderación” hizo frente a la deuda económica, al contexto pandémico, a la búsqueda de vacunas, la expansión de la democracia, “soy yo el que está al lado de Cristina cuando es perseguida injustamente”, e insistió en que "hace todo lo posible para que la justicia argentina vuelva a abrazar el derecho y deje de servir a factores de poder persiguiendo a quienes representan el pensamiento popular". “No dibujo un mundo irreal y sé lo que está sucediendo, entiendo el malestar y la queja de los más débiles, pero también veo lo que esta bien y lo ocultan”, esgrimió el presidente
Productividad
Ya en los ítems de su balance, y en cuanto al crecimiento económico, aseguró que el mismo supera a años anteriores y anticipó que se espera lo mismo para lo que va del año, detallando los logros de cada sector en el comparativo con la gestión anterior. Del mismo modo hizo hincapié en “la recuperación fuerte en las pymes industriales durante los años”. En relación al campo, advirtió sobre la sequía que azotó al sector, entre otras afectaciones sobre la producción, remarcó las medidas de apoyo, y aseguró que aún en ese marco las exportaciones fueron récord.
El reconocimiento a Massa
Prosiguiendo con el capítulo económico, Fernández reconoció el esfuerzo compartido y agradeció “el compromiso de Sergio Massa, quien dejó la presidencia esta Cámara para sumarse a la difícil tarea de conducir el Ministerio de Economía”. Allí aprovechó para reconocer el panorama actual, y expresar: "Tanto el ministro de economía como yo no necesitamos al FMI para saber que debemos lograr el equilibrio fiscal", manifestó. "Tampoco necesitamos al FMI para saber que la Argentina debe aumentar sus exportaciones, ya que si no generamos divisas no vamos a poder sostener nuestra actividad económica", agregó.
Anticipo sobre el canal de Magdalena
"Impulsamos el desarrollo de la hidrovía a través de la creación del Ente Nacional de Control y Gestión, integrado por las 7 provincias costeras", y adelantó Fernández "en los próximos días lanzaremos la licitación pública para la construcción de la vía navegable Canal Magdalena".
Salud
El mandatario detalló cifras alentadoras sobre la mortalidad materna a partir de la sanción de la Ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo, anticipó un proyecto del Ley para un sistema nacional de residencias médicas, e instó a avanzar en Salud Mental.
Turismo
En ese punto, se remarcó el récord histórico a través del sistema PREVIAJE, “nos conmueve observar que la actual temporada registra niveles jamás vistos. No es un grupo de privilegiados sino 2/3 de los argentinos y argentinas disfrutando de su descanso”, celebró.
Viviendas
Se destacaron la cantidad de viviendas familiares entregadas que suman 100 mil en la gestión, y 104 mil más en proyección
Educación
En el discurso, el presidente detalló las inversiones en el área, en todos los niveles, como también en el incentivo a la investigación.
"La universidad debe acercarse al alumno que quiere estudiar", dijo haciendo un apartado sobre el proyecto de creación de más casas de estudio y solicitó su urgente tratamiento en el Congreso. Asimismo adelantó un proyecto para aumentar los fondos en el área durante los próximos 10 años.
El recinto encendido: la vinculación con las provincias y el problema de la coparticipación
Sin dudas, uno de los momentos más álgidos en el acto acontenció cuando el presidente hizo hincapié en “la construcción de un verdadero federalismo”, y destacó el diálogo con los mandatarios provinciales.
Fernández aseguró que es el mandatario “que más recorrió el país”, y puntualizó sobre la coparticipación: “se hizo evidente el bloque de intereses tradicionales que buscan consolidar las enormes asimetrías”, señaló y refirió al fallo de la Corte que favoreció a la ciudad de Buenos Aires y a los magistrados: “le quitan dinero a los que mas tienen y destinan esos recursos a la ciudad más opulenta de la Patria”, dijo y remarcó con gran énfasis “que nadie se equivoque, soy orgullosamente porteño, pero no puedo ser indiferente al ver las asimetrías que separan a esta maravillosa ciudad de los rincones de la patria en donde se postergan los sueños de millones de argentinos y argentinas que padecen condenados al olvido”, generando controversia en el salón.
Versus el Poder Judicial
Sin indirectas, y en tono elevado Alberto castigó duramente la intervención de la Justicia en los poderes Ejecutivo y Legislativo: "la intromisión de la Justicia en la ejecución presupuestaria es definitivamente inadmisible. Excede sus facultades, olvida la regla jurisprudencialmente fijada que reconoce 'cuestiones políticas no judiciables'
Además se refirió al escándalo de las escuchas que develaron “la connivencia entre algunos magistrados, empresarios de medios de comunicación, ex agentes de inteligencia y políticos”. "El accionar de los miembros de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, nos llevó a presentar un pedido de juicio político ante la Cámara de Diputados", destacó aunque hizo la salvedad: "conozco la honestidad de muchos magistrados y funcionarios judiciales. Pero no podemos seguir mirando impávidos cómo las disputas palaciegas desatadas en el más alto tribunal del país por controlar el manejo de los recursos económicos del Poder Judicial acaban desatando abusos inadmisibles", dijo e insistió: “Atentan contra la Constitución”
Sobre la persecución a la vicepresidenta
En medio de un recinto caliente, y con los gritos de la oposición de fondo, el mandatario nacional prosiguió con tono acusatorio y cuestionó la sentencia contra Cristina Kirchner que la condenó a 8 años de prisión e inhabilitación para ejercer cargos públicos: “Lo hicieron tras simular un juicio en el que no se cuidaron las formas mínimas del debido proceso y se formularon imputaciones que rayan con el absurdo jurídico buscando su inhabilitación política”, aseguró aunque nunca pronunció la palabra “proscripción”: “levantamos nuestra voz porque el reclamo de justicia cobra vigencia una vez más cuando el derecho se tuerce por el odio y la persecución política”.
Ya en el cierre de su discurso, el Jefe de Estado instó a un “compromiso con la Patria” : “estuvimos de rodillas, pudimos ponernos de pie, ahora que volvimos a caminar, no dejemos que las diferencias políticas no nos dejen caminar”, dijo y pidió exclusivamente a los legisladores, que “no condicionen” la aprobación de leyes, como la de las nuevas universidades, y la de bioagroindustria: “con barullo político no se quien gana pero si se que pierde la gente”, aseguró.
“Que nuestra utopía sea la igualdad”, instó Alberto e invitó a “dar vuelta la pagina del tremendismo” y a trabajar sin mezquindades, dejando inaugurado el período de sesiones de los legisladores, donde se percibe a todas luces, un escenario agitado.