Empresas en crisis: 629 conflictos laborales exponen el mapa del ajuste productivo en todo el país

Entre 2024 y 2025, la Argentina atraviesa una crisis productiva de alcance nacional que ya no puede explicarse como una sucesión de casos aislados. El Mapa Federal de Empresas en Crisis, elaborado por el Centro de Economía Política Argentina (CEPA), contabiliza 629 conflictos laborales y cierres de empresas en todo el país, incluyendo despidos, suspensiones, cierres definitivos, quiebras, crisis productivas, retiros voluntarios forzados y procesos de venta o vaciamiento 

La radiografía expone con nitidez que el ajuste impacta sobre empresas emblemáticas, cadenas comerciales, industrias estratégicas y economías regionales, afectando de forma directa al empleo y al entramado productivo. La crisis se distribuye de manera desigual pero persistente en todas las provincias, revelando un deterioro estructural que atraviesa sectores clave como la industria, el comercio, la construcción, la energía y los servicios.

La provincia de Buenos Aires concentra el mayor número de conflictos, con 168 casos. Allí aparecen firmas como Papelera del Sur, Gráfica Anselmo, Tienda Dilsa, Cantera LCE Águila Azul, Hotel Tierra del Fuego, Marienplatz, además de grandes compañías como Pepsico, Santander, Coto, YPF, Fabi, Loma Negra y AESA, entre otras. El mapa bonaerense refleja con claridad la combinación de caída del consumo, parálisis de la obra pública y reducción de la actividad industrial.

En Santa Fe, donde se registran 65 conflictos, el ajuste golpea a empresas históricas del sector agroindustrial e industrial. Figuran Vicentin, SanCor, Verónica, Cargill, ADM, Electrolux, Acindar, Tenaris, Swift y Caminos del Uruguay, entre otras. La crisis se traduce en despidos, suspensiones y procesos de reestructuración que afectan a miles de trabajadores en una de las provincias más productivas del país.

Córdoba, con 38 conflictos, muestra un escenario similar. Empresas como Renault, Nissan, Arcor, Bimbo, Coca-Cola Andina, Mabe, Fadea, La Voz, Senestrari y Loza Zapata aparecen atravesadas por despidos, suspensiones o cierres parciales. El impacto sobre el cordón industrial cordobés revela la fragilidad del entramado manufacturero frente al nuevo contexto económico.

La Ciudad Autónoma de Buenos Aires, también con 38 conflictos, concentra problemas en el comercio, la gastronomía, los medios y los servicios. Allí se registran despidos y cierres en firmas como Disco, ChangoMás, Stamboulian, Prosegur, TyC Sports, Perfil, Galeno, Globant y restaurantes como Amador y La Buena Medida, reflejando la fuerte contracción del consumo urbano.

En el norte del país, la crisis adopta un perfil particularmente grave. La Rioja, con 52 conflictos, evidencia el colapso del sector textil y manufacturero, con empresas como TN Platex, Textilcom, Ritex, Hilados SA, Induquim, Verssion y la Cooperativa Textil de Chamical. El retiro de políticas de promoción industrial deja a cientos de trabajadores sin contención.

En Salta, se registran 19 conflictos, con casos como Aceros Zapla, Día, Seaboard, Farmacias Dr. Ahorro, Copersa y Posco Argentina, mientras que en Jujuy aparecen conflictos en Ledesma, Otito, Cencosud y Exar, muchos de ellos ligados a cierres o ventas de unidades productivas.

Tucumán, con 22 conflictos, presenta despidos y suspensiones en Topper, Coca-Cola, Scania, Ledesma, Papelera Tucumán y Panpack, mostrando la crisis en sectores industriales tradicionales. Catamarca, con 14 conflictos, incluye a COTECA, NEBA, Zijin, Textilcom y Longvie, combinando problemas en industria, comercio y minería.

En la región de Cuyo, Mendoza suma 16 conflictos, con empresas como IMPSA, Eventbrite, Norton, Aconcagua Energía, Canale y Refipampa. San Juan, con 13 conflictos, registra despidos y retiros voluntarios en SolFrut, Vicuña, Cencosud, Naturgy y Fecovita. San Luis, con 11, incluye a Arcor, Avery Dennison, Zanella, Rheem y TN Platex.

En la Patagonia, el impacto se siente con fuerza en energía, pesca e industria. Chubut registra 17 conflictos, con empresas como Halliburton, Schlumberger, Weatherford, TAE y Olgrec Fish. Río Negro, con 11, incluye a Pecom, Quintana Energy y Texproil, mientras que Neuquén, con 7 conflictos, evidencia despidos en NRG, Halliburton y Schlumberger, incluso en el corazón de Vaca Muerta.

Santa Cruz, con 19 conflictos, y Tierra del Fuego, con 28, muestran un fuerte impacto en comercio e industria. En esta última se destacan BGH, Mirgor, Radio Victoria, Tecnomyl, Australtex y Teo Grande, con más de un centenar de despidos solo en el sector comercial.

En el Litoral y el NEA, Entre Ríos suma 21 conflictos, con empresas como Carrefour, Diario UNO, Tres Arroyos, Unilever y Newtronic. Misiones, con 14, registra cierres y despidos en Dass, ElectroMisiones, Libertad y Cooperativa Agrícola Km. 16. Corrientes, con 20 conflictos, muestra un golpe severo en el sector maderero y de la construcción, con empresas como Celulosa Argentina, Tapebicuá, TN Platex y Easy, mientras que Chaco, con 9 conflictos, incluye a COTEMINAS, Somos Uno, Santander y Diarco.

Incluso provincias con menor volumen absoluto, como Formosa (3 conflictos) y Santiago del Estero (5), registran crisis en el comercio y despidos en firmas como Correo Argentino, Howard Johnson, COTEMINAS y ABC.

El informe del CEPA deja en evidencia que detrás de cada conflicto hay una constante: la caída del mercado interno, la apertura importadora, la paralización de la obra pública y la ausencia de políticas activas de protección al empleo y la producción. El resultado es un proceso de desindustrialización silenciosa que erosiona capacidades productivas y profundiza la desigualdad territorial.

Los 629 conflictos laborales registrados entre 2024 y 2025 no solo describen un presente crítico, sino que anticipan un escenario de mayor fragilidad social y económica si no se revierte el rumbo. El mapa federal del ajuste expone, provincia por provincia, el costo concreto de un modelo que avanza sobre el trabajo y la industria nacional