El debate por el rumbo económico volvió a tensarse en redes sociales con un fuerte cruce entre el ministro de Producción, Ciencia e Innovación Tecnológica de la provincia de Buenos Aires, Augusto Costa, y el ministro de Desregulación y Transformación del Estado de la Nación, Federico Sturzenegger, a partir de la polémica en torno al turismo emisivo, el uso de divisas y la competitividad de la economía argentina.
La discusión se desató luego de un extenso posteo de Sturzenegger en la red social X, en el que calificó a los argentinos que vacacionan en el exterior como “héroes de la producción”. Según el funcionario nacional, la demanda de dólares generada por los viajes al extranjero contribuiría a sostener la competitividad exportadora, bajo la premisa de que mayores importaciones inducen mayores exportaciones y un comercio exterior más dinámico.
LOS ARGENTINOS QUE VACACIONAN EN EL EXTERIOR SON LOS HÉROES DE LA PRODUCCIÓN. Todos los años para esta fecha empieza (único país del mundo) una letanía donde se considera que los veraneantes en el exterior están despilfarrando un recurso precioso de los argentinos. Casi un crimen… pic.twitter.com/13QMbsq7hW
— Fede Sturzenegger (@fedesturze) December 31, 2025
Para fundamentar su postura, Sturzenegger sostuvo que los países que más importan también son los que más exportan, y que restringir el comercio exterior reduce la demanda de divisas, aprecia artificialmente la moneda local y termina perjudicando al sector exportador. En ese marco, planteó que la apertura comercial y el estímulo a las importaciones permitirían a la Argentina “hacer aquello en lo que es buena” y dejar atrás décadas de bajo crecimiento. El funcionario alineó su visión con el proyecto económico del presidente Javier Milei, al que definió como el camino hacia una Argentina más próspera.
La respuesta de Augusto Costa no tardó en llegar y fue contundente. En un mensaje directo a Sturzenegger, el ministro bonaerense cuestionó la coherencia del planteo oficial y advirtió que la teoría que expone el Gobierno no se corresponde con la realidad actual del mercado cambiario argentino. “Para que tu lógica funcione en tus propios términos, el tipo de cambio debería flotar libremente”, señaló, y remarcó que hoy el dólar se encuentra intervenido.
Fede, impecable la teoría de manual de Introducción a la Economía. Pero lamento informarte que para que tu lógica funcione en tus propios términos, el tipo de cambio debería flotar libremente.
— Augusto Costa (@CostaAugusto9) December 31, 2025
Hoy, con el dólar intervenido, los 'héroes' que viajan al exterior con un tipo de… https://t.co/tz1mjZxvtO
Desde esa perspectiva, Costa afirmó que los viajes al exterior no fortalecen la competitividad exportadora sino que consumen divisas necesarias para la producción y el crecimiento. A su vez, advirtió que el atraso cambiario genera una competencia desleal que golpea de lleno al turismo interno, profundizando la crisis de uno de los sectores más sensibles de las economías regionales.
El funcionario provincial fue más allá y rechazó de plano la idea de que el turismo emisivo sea un motor de desarrollo. “Lo único que sostiene y fomenta la competitividad de la economía es la inversión, la ciencia, la tecnología y un mercado interno fuerte”, sostuvo, y acusó al Gobierno nacional de estar destruyendo precisamente esos pilares. En ese marco, criticó la celebración del uso de reservas para financiar turismo en el exterior y la descalificación de la industria nacional como “hacer eso en lo que sos malo”, una frase que atribuyó directamente al modelo defendido por Sturzenegger.
En el tramo final de su réplica, Costa vinculó el actual esquema económico con experiencias previas que, según su visión, ya fracasaron. Mencionó las gestiones de la Alianza, el macrismo y el actual gobierno libertario como ejemplos de una misma receta que, aseguró, nunca derivó en mayores niveles de exportación o importación sostenibles. El resultado, advirtió, es siempre el mismo: menos industria, un turismo nacional en crisis, economías regionales debilitadas y un país cada vez más endeudado.