Teléfono para Magario: El kirchnerismo le exige que convoque a sesionar para definir autoridades

La breve tregua que vivió el peronismo tras la aprobación del endeudamiento provincial quedó atrás. Este viernes, once senadores del núcleo kirchnerista enviaron una carta a Verónica Magario para pedirle una sesión urgente el próximo martes, con el fin de elegir las autoridades que quedaron pendientes en la preparatoria del 9 de diciembre.

Los senadores Sergio Berni, Diego Videla, Emmanuel Santalla, Evelyn Díaz, Laura Clark, Sabrina Bastida, Mónica Macha, María Rosa Martínez, María Laurini, Fernanda Raverta y Amira Curi solicitaron que la Cámara alta se reúna el martes a las 17. Quieren definir autoridades y tomar juramento a Roxana López, que reemplazará a Gabriel Katopodis, y a Marisa Pirillo, que ocupará la banca de Diego Valenzuela.

Además del debate interno, reclamaron incluir dos proyectos impulsados por Axel Kicillof: la creación de una empresa estatal de emergencias en salud y un laboratorio provincial para la producción de medicamentos. Ambos ya cuentan con media sanción y el aval de comisión, pero nunca llegaron al recinto pese a la insistencia del ministro Nicolás Kreplak.

El kirchnerismo busca tratarlos antes de que termine el período extraordinario, ya que, si no se aprueban ahora, perderán estado parlamentario y deberán reiniciar el recorrido legislativo. En ese marco, las iniciativas también se volvieron parte de la puja interna.

El nudo central del conflicto está en la jefatura del bloque de Unión por la Patria, vacante tras el paso de Teresa García al Congreso. El sector cristinista impulsa a Fernanda Raverta para la conducción y propone a Sergio Berni para una de las vicepresidencias, un reclamo que el exministro dejó expuesto en la sesión preparatoria cuando pidió un cuarto intermedio para definir cargos, solicitud que Magario rechazó.

Asimismo, Kicillof pretende que Ayelén Durán ocupe la vicepresidencia primera, mientras que el massismo apuesta por Malena Galmarini y Mario Ishii pide su espacio de poder. Cada sillón implica presupuesto y capacidad de firma, por lo que la pelea se vuelve más áspera.