Reparto fino: así quedó el nuevo mapa de poder en Diputados

El peronismo bonaerense terminó de ordenar el reparto de poder en la Cámara de Diputados y selló un acuerdo que repite el esquema de los últimos dos años: Alejandro  Dichiara asumirá la presidencia en 2026, mientras que Alexis Guerrera volverá a ocupar el sillón en 2027, en una alternancia que el oficialismo considera clave para mantener la unidad interna.
El entendimiento se completó de la siguiente forma:  

Vicepresidente: Alexis Guerrera (UP)
Vicepresidencia 1°: Agustín Forchieri (PRO)
Vicepresidencia 2°: Juan Osaba (LLA)
Vicepresidencia 3°: Mariano Cascallares (UP)

Una sesión preparatoria cargada de gestos políticos

La tarde comenzó con Rubén Eslaiman, como legislador de mayor edad, conduciendo provisoriamente la sesión y tomando juramento a los nuevos diputados. Hubo fórmulas clásicas, pero también una fuerte carga simbólica y política en cada promesa, donde se mezclaron referencias a los territorios, reivindicaciones históricas y señales hacia los liderazgos del espacio.

Desde Fuerza Patria, Juan Ariel Archanco pidió “Cristina libre porque es inocente” al asumir, mientras que Lucía Iañez destacó que juraba “por Dios, por la patria y por el hermoso pueblo de la provincia de Buenos Aires”. Juan Martín Malpeli lo hizo “por un Estado presente y un sano debate que permita consensos para una patria libre y soberana”.
También prestaron juramento Diego Nanni y Evelyn Flores Yanz, quienes expresaron su compromiso “por los compañeros, por sus hijas y por el legado de Néstor y Cristina”.

Carlos Puglelli reafirmó su mandato desde los distritos del interior provincial, mientras que Cintia Romero sumó un mensaje social al jurar “por los trabajadores excluidos y por las familias que no tienen techo”.
Facundo Tignanelli volvió a marcar su línea política al comprometerse “por Néstor, por Cristina y por los compañeros y compañeras que no traicionan”.
Mayra Mendoza enfatizó su pertenencia a Quilmes y cerró con un “por Cristina libre”.
Cascallares juró “por Dios y por la Patria”, reforzando su rol dentro del reordenamiento del oficialismo.
Aylén Rasquetti se refirió a su comunidad de Cañuelas y a su militancia en el Frente Renovador, mientras que Luis Vivona y Eva Limone acompañaron con compromisos vinculados a la memoria histórica; Limone lo hizo “por los 30 mil detenidos desaparecidos y por Cristina libre”.
José Galván evocó a Juan y Eva Perón, y Romina Barreiro habló “por Avellaneda”.
Desde el sur bonaerense, Alejandro Enrique Dichiara juró “por mi familia y por el pueblo de Monte Hermoso”.
En el bloque también asumió Maite Alvado, completando la representación territorial, al igual que Sofía Vanelli.

La Libertad Avanza aportó un bloque numeroso y heterogéneo, donde cada diputado imprimió su sello ideológico y territorial. Francisco Adorni, Julieta Quintero Chasman y Juan Esteban Osaba destacaron la defensa de la libertad como eje de su mandato. Natalia Blanco, Pablo Morillo, Analía Corvino y Alejandro Rabinovich sumaron referencias a la agenda liberal, mientras que Alberto Ontiveros lo hizo destacando “la representación de La Matanza”.
Florencia Retamoso habló “por una provincia con libertad”, y Nahuel Sotelo Larcher reafirmó su postura “por la defensa de la vida desde la concepción”. Leticia Bontempo, Oscar Liberman, Carla Panelli, Héctor Gay, Mariela Vitale y Gustavo Coria completaron las juras libertarias.

En la izquierda, Cristian Castillo asumió en reemplazo de Nicolás del Caño y juró “por las clases trabajadoras oprimidas, por Palestina libre y por los 30 mil desaparecidos”. Mónica Schlotthauer ratificó su compromiso “con los luchadores sociales, los derechos conquistados y la memoria de los compañeros desaparecidos”.

Los ausentes

La sesión dejó también dos ausencias relevantes: la vicegobernadora Verónica Magario, por la tercera sección en el espacio de Fuerza Patria, y Manuel Passaglia, del espacio Hechos, quienes no participaron de la ceremonia y cumplirán posteriormente con el trámite de jura según el reglamento interno.

La votación y el cierre del acuerdo

El momento clave llegó cuando el presidente del Bloque oficialista Facundo Tignanelli propuso formalmente a Dichiara para presidir la Cámara, destacando “su capacidad de conducción” y el funcionamiento democrático del recinto durante su gestión anterior. Desde la oposición, Diego Garciarena acompañó la nominación y sumó un reconocimiento explícito a Alexis Guerrera, remarcando que “en un año difícil supo generar los ámbitos necesarios para buscar acuerdos”.  La izquierda, fiel a su posición histórica, volvió a abstenerse en la votación de autoridades, a través de Cristian Castillo.

Con el acuerdo sellado, el peronismo bonaerense vuelve a consolidar una conducción compartida entre sus distintos sectores: intendentes, kicillofistas, massistas y camporistas. Dichiara y Guerrera alternarán el poder y Cascallares ocupará un lugar estratégico, en un escenario donde Axel Kicillof necesita mayorías firmes para avanzar con endeudamiento, emergencias y reformas claves.

En su discurso de aceptación, Dichiara agradeció “el acompañamiento del espacio de Fuerza Patria” y mencionó de manera directa a Cristina Fernández de Kirchner, a Máximo Kirchner, al gobernador Axel Kicillof y a Sergio Massa. También expresó su reconocimiento al jefe de bloque, Facundo Tignanelli, y recordó las palabras que el gobernador pronunció el lunes en conferencia de prensa.
“Nos pidió a los legisladores que votemos la Ley de Financiamiento. Los que fuimos intendentes sabemos la enorme responsabilidad que implica llevar adelante un municipio y lo difícil que se vuelve cuando no hay recursos para sostenerlo”, dijo. Y agregó: “Aquí hay intendentes de todos los colores y todos somos conscientes de la importancia de esta ley. El bloque de Fuerza Patria se puso a disposición y trabaja con sus referentes junto a los demás bloques, como lo hicimos con otras leyes que necesitó el gobernador. Votamos el Presupuesto, la Ley Fiscal Impositiva y vamos a buscar todos los consensos posibles para que esta ley, que necesitan los habitantes de la provincia de Buenos Aires, salga. Quédese tranquilo, señor gobernador”.

La Cámara baja inicia así un nuevo ciclo con señales de continuidad en el oficialismo y un mapa opositor más fragmentado pero con presencia libertaria ampliada, lo que anticipa un recinto con tensiones, negociaciones y un fino equilibrio político durante todo el año legislativo.