Con el Presupuesto 2026 y la Ley Fiscal e Impositiva ya sancionados en ambas cámaras, el gobierno bonaerense avanzó este jueves con la primera instancia de articulación directa con los municipios: una reunión macrofiscal encabezada por el ministro de Economía, Pablo López, destinada a revisar el cuadro económico actual y el impacto inmediato que tendrá en las arcas locales. El encuentro se desarrolló en la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad Nacional de La Plata y convocó a los responsables de Hacienda de los 135 distritos.
La presentación del equipo económico provincial giró en torno a tres ejes centrales: los lineamientos generales del presupuesto aprobado, la situación fiscal de la Provincia en un contexto de recesión, y los desafíos que enfrentan los municipios ante un nivel de dependencia creciente de la coparticipación. López expuso un panorama complejo atravesado por caída de ingresos, desaceleración de la actividad y una inflación que, aunque en descenso, continúa debilitando la recaudación.
Municipios condicionados por la recesión y la caída de recursos propios
Los representantes comunales coinciden en que el escenario económico los obliga a reformular sus proyecciones para 2026. En el encuentro, distintos funcionarios señalaron que “la recesión se verifica en todas las cadenas productivas” y que esa contracción se traduce en menos actividad y menos ingresos por tasas locales. Así, se profundiza una tendencia crítica: la pérdida de autonomía fiscal.
La mayoría de los municipios bonaerenses depende en altos porcentajes de las transferencias provinciales y nacionales. Con la caída de los recursos propios, esa dependencia se vuelve aún más estructural, complicando la elaboración de los presupuestos locales. Muchos intendentes aguardan definiciones de la administración provincial para terminar de ajustar sus cálculos de gastos y recursos para el próximo año.
Si bien el Presupuesto 2026 y la Ley Fiscal ya fueron sancionados, el pedido de endeudamiento quedó pendiente. Se trata de la tercera herramienta solicitada por el Ejecutivo provincial para afrontar la caída de ingresos y garantizar la continuidad de obras y programas estratégicos. La discusión será retomada este viernes en la Legislatura, donde aún persisten diferencias entre oficialismo y oposición respecto del monto y el destino de los recursos.
En paralelo, la Provincia acelera contactos técnicos y políticos con los municipios, consciente de que la coordinación fiscal será clave para atravesar un 2026 marcado por la incertidumbre macroeconómica y por la necesidad de sostener los servicios esenciales en el territorio bonaerense.