
En el marco del Día de la Lealtad Peronista, la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner envió un mensaje a la militancia que participó de la masiva movilización en conmemoración del 17 de octubre. Mediante un audio, recordó el valor histórico de esa jornada y la definió como una lección que mantiene plena vigencia: “Cuando un pueblo defiende sus derechos, defiende su libertad”.
También destacó que el aniversario no debe limitarse a un hecho conmemorativo, sino asumirse como un compromiso activo con los principios del movimiento. “Cuando los poderosos de afuera quieren decidir quién gobierna, la respuesta tiene que ser la misma que hace 80 años: la soberanía no se negocia”, afirmó.
Durante su intervención, la titular del Partido Justicialista evocó la movilización de 1945, cuando los trabajadores exigieron la liberación de Juan Domingo Perón. “Aquel 17 de octubre no solo fue una gran manifestación obrera, fue el acto de conciencia nacional y popular más formidable de nuestra historia”, expresó.
Repasó además el contexto de la detención del entonces secretario de Trabajo y Previsión, señalando que la presión de la Embajada de Estados Unidos, encabezada por Spruille Braden, fue determinante. “El pueblo respondió con una consigna que marcó una época: ‘Braden o Perón’. No era una frase, era una declaración de independencia”, subrayó.
En su mensaje, Kirchner trazó un paralelismo con la actualidad y sostuvo que las tensiones entre los intereses nacionales y los externos siguen presentes. “Hoy pareciera ser Bessent o Perón. Estar 80 años después en la misma situación demuestra que el problema no es la injerencia extranjera, sino la incapacidad de la derecha y del poder económico para construir un proyecto que incluya a todos”, planteó.
En esa línea, criticó la política económica del actual gobierno y la influencia de fondos financieros internacionales, al advertir que “la compra de pesos por parte de capitales norteamericanos no es más que un intento de ganar tiempo con el viejo libreto del endeudamiento”.
Finalmente, cuestionó la relación entre el presidente Javier Milei y el ex mandatario estadounidense Donald Trump, a quien acusó de representar intereses ajenos a la soberanía nacional. “Cuando uno escucha a Trump hablando de Milei como si fuera su empleado del mes, queda claro que algunos buscan volver a los tiempos en que las decisiones del país se tomaban en una embajada”, concluyó.