viernes 28 de noviembre de 2025
- Edición Nº2550

Provincia

polémica encendida

Ley de Suelos en Buenos Aires: ¿protección ambiental o intromisión en la propiedad privada?

El proyecto impulsado por el Colegio de Ingenieros Agrónomos y Forestales genera rechazo en el sector agropecuario por la obligación de los productores a someterse a planes de manejo supervisados, mientras sus defensores destacan la necesidad de preservar suelos y agua.



Un proyecto de Ley de Suelos presentado por el Colegio de Ingenieros Agrónomos y Forestales de la provincia de Buenos Aires (CIAFBA) desató un intenso debate en el sector agropecuario bonaerense. La iniciativa, que busca declarar la protección del suelo y el agua como de interés público, fue criticada por productores y legisladores, que alertan sobre posibles impactos en la autonomía de la propiedad privada y el aumento de la burocracia.

La Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa (CARBAP) manifestó su rechazo, advirtiendo que la norma podría “avanzar sobre la propiedad privada de los productores imponiendo controles, sanciones y burocracia que nada aportan al cuidado real del recurso”.

 

 

El diputado provincial Luciano Bugallo sostuvo que, aunque el proyecto “suena muy lindo”, en la práctica puede transformarse en un instrumento de persecución y control político y económico. Según explicó, el proyecto faculta al Estado para intervenir en decisiones de los productores, obligándolos a presentar planes de uso y manejo de la tierra, firmados únicamente por ingenieros agrónomos matriculados en CIAFBA. “Convierte a los productores en rehenes de una corporación que cobra honorarios obligatorios”, advirtió Bugallo.

 

 

El legislador resaltó además que la iniciativa establece un sistema de premios y castigos, vinculando beneficios impositivos a la obediencia de los planes oficiales. “En lugar de fomentar la innovación, la inversión y la libertad de producción, promueve un esquema intervencionista y corporativista que puede ser utilizado como herramienta de persecución”, concluyó.

Por su parte, los representantes de CIAFBA defendieron la iniciativa ante la Comisión de Asuntos Agrarios y Pesca del Senado bonaerense. Lorena Elorriaga, Horacio Repetto y Guillermo Studdert sostuvieron que el suelo es un recurso finito y que su mal uso genera erosión y pérdida de materia orgánica. “El proyecto busca velar por el uso eficiente y seguro de los recursos naturales para producir alimentos y otros bienes y divisas”, indicaron.

El proyecto contempla la creación de una Mesa Provincial integrada por ingenieros agrónomos, funcionarios, entidades agropecuarias e instituciones científicas, y un Fondo Provincial para el “Cuidado y Recuperación del Suelo y el Agua”. También prevé beneficios fiscales para quienes adhieran a los planes de manejo aprobados, con énfasis en la conservación de suelos y mitigación de efectos del cambio climático.

Sin embargo, Bugallo cuestiona la viabilidad y los costos de la propuesta. Según el legislador, destinar fondos públicos a un esquema de control puede resultar en un gasto innecesario y una mayor presión impositiva sobre los productores. “Si de verdad queremos cuidar los suelos, lo primero es reducir la carga fiscal que hoy alcanza el 70% y darle rentabilidad al productor. Con más margen, se invierte en fertilización y conservación; sin eso, muchas veces se termina haciendo minería a cielo abierto en lugar de agricultura”, argumentó.

El debate refleja la tensión entre la necesidad de preservar los recursos naturales y la preocupación por la autonomía de los productores. Mientras el CIAFBA promueve la ley como un instrumento de cuidado integral del suelo y el agua, buena parte del sector agropecuario y algunos legisladores alertan sobre riesgos de intervención excesiva y corporativismo profesional.

En este contexto, el futuro de la Ley de Suelos dependerá del equilibrio que logre entre regulación ambiental y respeto a la propiedad privada, un desafío que marcará la agenda política y económica del agro bonaerense en los próximos meses.

OPINÁ, DEJÁ TU COMENTARIO:

3