
Tras la amplia victoria en las elecciones bonaerenses, el legislador Juan Malpeli analizó el impacto del resultado en el escenario nacional, cuestionó las políticas del Gobierno de Javier Milei y advirtió sobre el desafío inmediato de construir una oposición seria con propuestas claras.
“Creo que principalmente hay un gran llamado de atención al gobierno nacional, claramente, y enhorabuena, de que las cosas no están haciéndose bien. Eso me parece que influye, los últimos acontecimientos de corrupción, sí, obviamente que influyen, pero esto es un proceso que viene mal desde que arranca el gobierno nacional, con un ajuste desmedido que nunca fue a esa supuesta casta, sino que fue a la mayoría del pueblo argentino”, sostuvo Malpeli en diálogo con Nuevo Diario.
El legislador enumeró los sectores más golpeados por las medidas oficiales: “Los jubilados, las universidades, la salud, la educación, las pymes, a tantos lugares que quizás no estaban tan bien, pero terminaron de destruirlos”.
El peso de la unidad
Consultado sobre el gran ganador de la contienda en la provincia de Buenos Aires, Malpeli evitó personalismos y destacó el rol colectivo:
“Más allá de quién se lleva la cocarda del ganador, lo más profundo es preguntarnos para qué ganamos. El conjunto fue el que ganó, claramente. Lo que se demostró es que ganó la unidad. El que no entiende eso, va a pifiar en el análisis y después en la estrategia política”.
En ese marco, reconoció tanto al gobernador Axel Kicillof como a Sergio Massa:
“Obviamente que Axel se lleva una gran cocarda de la elección, no le quito mérito para nada, porque si le iba mal también iban a decir que el culpable era él. Pero también es verdad que el gran armador de esta unidad fue Massa, y hay que reconocer también el aporte del kirchnerismo en sus distintas expresiones”.
De cara a las elecciones de octubre, Malpeli planteó que el resultado impone nuevas responsabilidades: “Nosotros tenemos la responsabilidad inmediata de generar una oposición seria al gobierno nacional. Ganar te da un festejo cortito, enseguida viene la obligación de demostrar con acciones que hay un proyecto sólido y alternativo”.
Con metáfora futbolera, advirtió: “Son elecciones distintas, como partidos de un mismo campeonato. La provincia fue un triunfo importante, pero en octubre se juega otro partido. Y el campeonato no termina ahí, sino que sigue en 2027. Por eso tenemos que entender que primero es el qué y después el quién”.
Finalmente, llamó a cuidar la cohesión interna del espacio: “Los reproches públicos no le hacen bien a la unidad. No se trata de no discutir, sino de elegir las formas y que esas discusiones sean puertas adentro. Tenemos que aprovechar esta elección no solo para octubre, sino para consolidar un proyecto de futuro”.