
El intendente de Junín, Pablo Petrecca, se plantó con un fuerte mensaje político tras imponerse en su distrito como candidato a senador provincial por el frente Somos Buenos Aires, donde rompió la polarización y superó por cinco puntos a La Libertad Avanza en la categoría Senador, y por ocho en la de concejales. Aunque quedó detrás de Fuerza Patria, el resultado lo ubicó como uno de los pocos intendentes macristas que resistieron la ola libertaria en la provincia.
En declaraciones a Infobae, Petrecca marcó distancia del acuerdo electoral entre el PRO y el oficialismo nacional, y lanzó críticas directas a los referentes de su propio espacio. “Al Gobierno no le sirve que nuestros dirigentes se pinten de violeta y digan todo que sí”, advirtió, en un mensaje que apunta a la interna amarilla.
El jefe comunal cuestionó la estrategia de nacionalizar una elección local y denunció la falta de respuestas del Ejecutivo: “En Junín tenemos una obra ferroviaria paralizada desde diciembre de 2023. Golpeamos puertas hace un año y medio, y no hay respuestas”, señaló.
Petrecca también criticó la radicalización del discurso libertario. “Los discursos de odio y los extremos perjudican al propio Gobierno”, sostuvo, y pidió “bajar la soberbia” y “tender puentes con gobernadores e intendentes que no son ratas ni casta”.
El mensaje final del intendente buscó trazar una línea de futuro dentro del PRO: “El partido tiene futuro, muchos de ellos no. Hay dirigentes que ya no representan lo que fuimos”, sentenció.
Con este posicionamiento, Petrecca emerge como una de las voces críticas del macrismo bonaerense frente a la estrategia de subordinación al oficialismo libertario, abriendo un debate interno sobre el rumbo del partido en la nueva etapa política.