
En declaraciones radiales la ministra de Tierra y Hábitat, Silvina Batakis, afirmó: “Esperábamos ganar pero no con esta magnitud, fue una alegría muy grande para todo el pueblo peronista”.
Además, consideró que el resultado de los comicios constituye “la revalidación” de la postura clara del gobernador Kicillof que “desde el principio dijo que no compartía nada lo que hacía el gobierno nacional”.
“Argentina es un pueblo de paz, somos solidarios, y creo que nos cansamos del discurso de odio. Nuestra propuesta es vivir en armonía, que la gente pueda progresar, con un Estado presente y eficiente, que es lo que nos pide el Gobernador”.
En relación al estado de la economía, Batakis señaló: “La inestabilidad la tenemos que adjudicar solamente a las políticas de este Gobierno” y enfatizó: “Si una elección provincial hace que tengas tanta inestabilidad es porque no tenés resto económico ni músculo político”.
En esa línea, añadió que “el 2% de inflación sigue siendo alto, ayer se renovó deuda al 60% y esas tasas de interés no permiten que haya proyectos productivos en Argentina y el progreso queda vez más lejos en el imaginario de todos. Si querés llegar a la Presidencia es para mejorar la vida de la gente, no para empeorársela”.
En tanto, la Ministra advirtió que “los bancos están yendo marcha atrás con la oferta de préstamos hipotecarios: no veo los beneficios de la macroeconomía porque a la gente le va mal y no hay operaciones de crecimiento genuinas”. Seguido, consideró que “no hay ningún país desarrollado en el mundo que no haya invertido en infraestructura. Es imposible pensar que se puede progresar” de esa manera.
En otro orden, la funcionaria informó que hoy harán entrega de 32 viviendas en Lobería junto al intendente, Pablo Barrena. En ese aspecto, recordó que Nación abandonó la construcción de 16 mil viviendas, mientras que la Provincia se están haciendo 8 mil, una cifra récord en su historia.
“De las 16 mil viviendas” paralizadas por Milei, “el Gobernador nos pidió que las empecemos a terminar, estamos finalizando 2 mil” y comenzando las obras en otras 900. Eso, pese a la “asfixia adrede que aplica el gobierno nacional sobre todas las provincias, pero especialmente sobre Buenos Aires”.