
El ministro de Seguridad bonaerense, Javier Alonso, se refirió este jueves al episodio de violencia que sufrió el presidente Javier Milei durante una caravana en Lomas de Zamora y advirtió que la custodia nacional “no lo cuidó”. Además, confirmó que ya se ejecutaron allanamientos y hay ocho barrabravas prófugos por los disturbios en la cancha de Independiente la semana pasada.
En diálogo con la periodista María O’Donnell, Alonso relató que el mandatario fue agredido con piedras durante su recorrida en camioneta junto a candidatos locales. “Fue una exposición que no estuvo cuidada, el presidente quedó en una situación delicada”, señaló. El ministro explicó que la seguridad primaria del mandatario corresponde a la Casa Militar, aunque la Policía bonaerense aportó refuerzos. “Mandé 50 efectivos adicionales que no estaban previstos porque veíamos que el operativo estaba desprotegido”, indicó.
Respecto a los detenidos, Alonso precisó que uno permanece bajo arresto por haber arrojado una piedra contra la comitiva, mientras que otro militante —acusado de haberse parado frente a la camioneta presidencial— fue liberado aunque sigue vinculado a la causa que tramita en la Justicia Federal.
Al ser consultado sobre si consideraba que existió una puesta en escena para victimizar al Presidente, Alonso respondió que la situación fue “extraña” y que la política nacional debería “bajar un cambio” para evitar que se siga alimentando un clima de violencia.
Investigación en Independiente
El funcionario también se refirió a los graves disturbios ocurridos la semana pasada en el estadio de Independiente, donde facciones locales e hinchas chilenos protagonizaron una batalla campal.
Alonso reveló que en las últimas horas se libraron ocho órdenes de allanamiento y detención, pero que los implicados no fueron encontrados en los domicilios, por lo que permanecen prófugos. “Se identificaron barras, se secuestraron armas de fuego y prendas utilizadas en los incidentes”, detalló.
El ministro cuestionó el rol del club en materia de seguridad interna: “Había deficiencias en la seguridad privada y hasta se abrieron portones que facilitaron el acceso de barras. El club tiene que dar explicaciones”, advirtió.
Finalmente, destacó que durante el operativo la policía bonaerense evitó que los enfrentamientos escalaran aún más. “Se preservó a más de 2.600 personas que pudieron salir sin ser agredidas, aunque hubo 111 detenidos y varios policías heridos en el procedimiento”, subrayó.