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El candidato, que actualmente preside el Instituto de Ayuda Financiera para el Pago de Retiros y Pensiones Militares (IAFPRPM), reconoció que su postulación fue sorpresiva. Según relató a Noticias Argentinas, al cierre de listas figuraba en el tercer puesto, pero pocos días después se le informó que encabezaría la boleta que antes lideraba Juan Osaba. “Fue todo bastante sorpresivo para mí. Me lo comunicó mi hermano, después de trabajar con Osaba y Matías de Urraza en el armado platense. Uno es una pieza en la causa y ya no decide uno”, explicó.
Respecto a las críticas por nepotismo, Adorni las desestimó como “chicanas lógicas a un Gobierno que funciona”. “Antes trabajaba en el Estado sin ser ‘el hermano de…’. Soy un profesional, me formé en esto. No vinimos de Marte”, sostuvo.
Con un discurso de confrontación directa contra el peronismo local, el candidato libertario apuntó: “Vamos contra un monstruo de unas dimensiones importantes. Es el tramo final del kirchnerismo que tan mal le hizo al país y a la provincia. En La Plata vamos contra un aparato que tiene todas las mañas y todas las trampas. Nosotros vamos con ideas. Hay que discutir ideas”.
Su militancia política no es completamente nueva. En 2005 participó del armado del expresidente Eduardo Duhalde en La Plata como candidato suplente a consejero escolar en la boleta del Frente Justicialista. Hoy recuerda aquella experiencia como “una aventura antikirchnerista” y reivindica su pasado menemista: “Siempre fui menemista. Hasta el 10 de diciembre de 2023 pensaba que Menem había sido lo mejor que vi, pero la presidencia de Milei tapó ese pensamiento. Estoy viendo lo mejor que vi en mis 42 años”, afirmó, luciendo un reloj con la imagen del expresidente riojano.