
Por primera vez en años, la provincia de Buenos Aires concentra su definición electoral lejos de la elección presidencial, obligando a oficialismos y oposiciones a jugar sus mejores cartas para defender territorios y consolidar proyecciones nacionales. En este escenario, las candidaturas testimoniales resurgen como herramienta de tracción de votos y blindaje de poder local con puños cerrados y dientes apretados.
Las candidaturas testimoniales buscan fortalecer boletas y al tiempo que plebiscitar gestiones en un escenario donde el oficialismo provincial con sus agrietamientos internos enfrenta la avanzada libertaria y un PRO fragmentado. La decisión de intendentes y funcionarios de inscribirse en listas legislativas expone dos ejes:
Por un lado, la tracción de votos en elecciones locales desdobladas, donde los jefes comunales son figuras con legitimidad territorial y visibilidad permanente.
En tanto que por otro, como respuesta de repliegue defensivo y proyección: ante la incertidumbre nacional, las candidaturas testimoniales aseguran visibilidad, marcan territorio frente a LLA y sostienen liderazgo político sin perder el control municipal.
Primera sección electoral: el nuevo gigante
Con 5.131.861 votantes (4.732.831 nacionales y 399.030 extranjeros), la Primera sección se consolidó como la más numerosa, superando a la tradicionalmente dominante Tercera. Aquí se concentra la atención de Fuerza Patria (FP), que baraja a jefes comunales con peso territorial como Leonardo Nardini (Malvinas Argentinas), Juan Andreotti (San Fernando) y Federico Achával (Pilar). También suena Gabriel Katopodis, ministro de Infraestructura y exintendente de San Martín, como candidato a senador provincial. El objetivo: fortalecer al peronismo en un corredor clave del norte y oeste del conurbano.
Del lado de La Libertad Avanza (LLA), emerge Diego Valenzuela (Tres de Febrero) como carta fuerte. Su salto del PRO a LLA lo posicionaría para encabezar la lista , sin disimular además sus intenciones de proyectarse a una futura candidatura a gobernador, tensionando a referentes libertarios como José Luis Espert.
En Somos Buenos Aires (SB), el intendente de Tigre Julio Zamora podría competir como senador provincial, en un armado que desafía al massismo tradicional y reconfigura el mapa peronista local con miras a configurarse como la famosa tercera vía, a donde confluyan los desencantados de uno y otro sector.
Segunda sección: el interior y el peso de Salto y San Pedro
Con 661.721 electores (649.465 nacionales y 12.256 extranjeros), esta sección es campo de disputa entre el Instituto Patria y el MDF. FP analiza a Ricardo Alessandro (Salto) y Cecilio Salazar (San Pedro) como posibles cabezas de lista, mientras La Libertad Avanza define entre Analía Corvino (San Pedro), Iván Pérez Morelli (Salto) y Ana Clara Petroccini. Sergio Berni sigue siendo un nombre en danza, junto con Agustina Propato y Naldo Brunelli.
Aquí el PRO sufre dispersión tras el alejamiento de intendentes como el de Pergamino y la irrupción de HECHOS, el armado de los Passaglia en San Nicolás, que reconfigura la interna amarilla. La fuga de jefes comunales otrora amarillos consolida además otra posible tercera vía al menos en este anillo electoral.
Tercera sección: testimonio y caudal electoral histórico
Con 5.101.177 votantes (4.637.863 nacionales y 463.314 extranjeros), se mantiene como el segundo gran caudal electoral bonaerense. FP evalúa candidaturas testimoniales como la de la vicegobernadora Verónica Magario o Mayra Mendoza (Quilmes). Mariano Cascallares (Almirante Brown) podría volver a encabezar la lista de diputados, mientras Nicolás Mantegazza (San Vicente) suena como alternativa. La tensión sin dudas reina en el minuto a minuto, y los referentes del kirchnerismo duro, podrían no encabezar las listas como parte de su estrategia y disidencia con MDF.
Aquí, Somos Buenos Aires busca anclar con Fernando Gray (Esteban Echeverría) en tándem con Zamora, sin definiciones hasta el momento. En tanto, LLA no definió aún figura de peso, pero su armado busca replicar el modelo de la Primera sección: candidatos con gestión territorial y potencial proyección provincial.
Cuarta sección: territorio esquivo para el peronismo
Con 547.677 votantes (540.354 nacionales y 7.323 extranjeros), FP analiza a Julián Domínguez, Walter Torchio o Valeria Arata. En LLA, nombres como Gonzalo Cabezas y Analía Balaudo surgen desde el karinismo, aunque la atomización libertaria anticipa al menos tres listas fuertes, un fenómeno que podría fragmentar su caudal electoral.
Quinta sección: foco marplatense
Con 1.336.787 votantes (1.290.948 nacionales y 45.839 extranjeros), destaca la postulación de Guillermo Montenegro (Mar del Plata) por LLA. Cercano a PRO y con aspiraciones de integrar el gabinete nacional o el Poder Judicial, su candidatura testimonial fortalecería la lista pero no garantiza dedicación legislativa. FP debate entre Gustavo Barrera (Villa Gesell) y Fernanda Raverta (Mar del Plata), mientras Somos Buenos Aires busca posicionar a la UCR con Miguel Lunghi (Tandil).
Sexta sección: Bahía Blanca como eje
Con 672.483 electores (652.077 nacionales y 20.406 extranjeros), el armado de LLA ubica en punta a Oscar Liberman y Luz Bambaci, seguidos de referentes como Fernando Compagnoni, Gustavo Coria, Héctor Gay y Abigaíl Gómez. FP se inclina por Luis Calderaro, mientras La Cámpora retendría el segundo lugar con Maite Alvado. El massismo promueve a Sergio Bordoni (Torquinst). No obstante podría encabezar el mismo Susbielles las listas oficialistas.
Para Somos Buenos Aires, Andrés de Leo sería referente de esta sección.
Séptima sección: tres bancas en juego
Con 285.047 votantes (281.130 nacionales y 3.917 extranjeros) y un piso alto del 33,33%, Olavarría concentra el interés. César Valicenti y José María Eseverri figuran entre los peronistas, mientras Eduardo “Bali” Bucca (Bolívar) busca sostener su banca. LLA propone a Celeste Arouxet y Ezequiel Galli (exintendente de Olavarría).
Octava sección (La Plata): reparto milimétrico
Con 639.839 electores (576.691 nacionales y 63.148 extranjeros), FP apunta a un reparto equitativo: Ariel Archanco (La Cámpora), Lucía Iáñes (alakismo) y Juan Malpeli (massismo), aunque también suena Carlos Bianco. LLA define entre Francisco Adorni (hermano del vocero presidencial), Carolina Barros Schelotto, Juan Osaba y Carolina Píparo. Para la oposición en esta sección, la fricción y malestar (sobre todo en el PRO) reside en que “los nombres se decidirían en escritorios de CABA”, según expresaron en redes sociales En tanto, por Somos Buenos Aires, encabezaría Claudio Frangul.
La cuenta regresiva al cierre de listas se acelera. El sábado a la medianoche se sabrá qué nombres, de los tantos en danza, se materializan en boletas. Y cuántos de ellos, finalmente, ocuparán la banca que sus electores voten, en una elección donde la política bonaerense se juega su subsistencia y su futuro.