
El Gobierno nacional decidió modificar de manera sustancial el régimen de residencias médicas en el país, al aprobar la resolución 2109/25 que transforma estas instancias de formación en becas sin relación laboral. El cambio fue oficializado justo un día después de que se realizaran los exámenes de ingreso, que contaron con 13.476 inscriptos para 7.687 vacantes en todo el país.
La medida derogó las normas de 2015 y su modificatoria de 2023, eliminando el carácter de empleo o contratación laboral que hasta ahora tenía la residencia y reconociéndola únicamente como un proceso formativo con beca. Según se informó, los aspirantes podrán optar entre dos modalidades: la Beca Institución, que otorga el monto íntegro del haber mensual (cerca de $990.000) sin descuentos y con cobertura de ART y mala praxis; o la Beca Ministerio, que implica recibir un recibo formal de sueldo con descuentos previsionales, obra social estatal y ART, y un ingreso neto de aproximadamente $810.000.
En ambos casos, la nueva reglamentación aclara que la beca no será considerada empleo público ni relación laboral. Además, los residentes que ya están en formación podrán cambiar al nuevo esquema, aunque quienes no lo hagan mantendrán las condiciones vigentes.
La resolución también introdujo la libertad de elección para el último tramo de la residencia y redefinió la organización de cada institución. Este cambio se suma al “nuevo esquema soberano” establecido por la resolución 2099/25, que otorgó puntaje adicional a los aspirantes formados íntegramente en universidades argentinas.
En esa línea, el Ministro de Salud de Nación, Mario Lugones defendió la resolución y apuntó: "Más libertad, más transparencia"
LES DAMOS POSIBILIDAD DE ELEGIR A LOS RESIDENTES MEDICOS
— Mario Lugones (@Mariolugones_ar) July 2, 2025
A partir de hoy, abrimos una nueva opción para los residentes del Garrahan:
👉 Contrato directo con el hospital. Cobran más (sin descuentos), pueden recibir bonos y el hospital les cubre los seguros.
Por el contrario, si… https://t.co/NrySEZ3WJ2
Sin embargo, la reacción en el Hospital Garrahan no tardó en llegar. A través de un comunicado, sus residentes denunciaron que la medida implica un cierre de hecho de la residencia pediátrica más prestigiosa del país. “Transformaron la residencia en una beca precarizada. Dejaremos de cobrar un sueldo en blanco, no tendremos obra social, aportes jubilatorios, aguinaldo, licencias y antigüedad. A cambio, recibiremos un estipendio. No es salario. No hay derechos laborales. No hay futuro”, señalaron.
Desde el Garrahan apuntaron contra el Ministerio de Salud por sostener que el prestigio del hospital sería suficiente incentivo. “Como si el prestigio pudiera pagar alquiler, comida o salud. Como si los cuatro años de formación, guardias interminables y responsabilidades clínicas pudieran pagarse con palmaditas en la espalda”, expresaron en su comunicado publicado en redes sociales.
Finalmente, advirtieron que sin residentes el funcionamiento del Garrahan se vería afectado y alertaron que la decisión “no es solo un ataque a los médicos en formación, sino un intento de destruir el sistema de residencias y precarizar aún más la salud pública”.