
La relación entre el gobierno de Javier Milei y el campo, uno de sus principales sostenes electorales, atraviesa su momento más tenso desde la asunción presidencial. La Mesa de Enlace, integrada por la Sociedad Rural Argentina, CONINAGRO, Confederaciones Rurales Argentinas (CRA) y Federación Agraria, difundió un documento titulado “Una Argentina sin retenciones”, donde cuestionó abiertamente la política agropecuaria oficial.
“El cuestionamiento principal de la vigencia de los Derechos de Exportación (DEX), más allá de las alícuotas, es que son un impuesto distorsivo, anacrónico y perjudicial, ha hecho que nuestro país desaproveche inmejorables oportunidades para la inversión y el desarrollo federal”, expresaron las entidades. En el texto, remarcaron que las retenciones generaron “un inevitable retraso social, tecnológico y productivo”, pese al esfuerzo de los productores por sostener la producción y el arraigo rural.
🚨 𝐔𝐧𝐚 𝐀𝐫𝐠𝐞𝐧𝐭𝐢𝐧𝐚 𝐬𝐢𝐧 𝐫𝐞𝐭𝐞𝐧𝐜𝐢𝐨𝐧𝐞𝐬 🇦🇷🚜@SociedadRural @CRAprensa @fedeagraria pic.twitter.com/9w4UzoEfNZ
— CONINAGRO (@CONINAGRO) June 30, 2025
La crítica se inscribe en un escenario de creciente malestar en las bases rurales, que presionan a sus dirigentes para endurecer la postura ante un gobierno que, a pesar de sus promesas de desregulación y liberalización total, mantiene en pie el esquema de retenciones, afectando la rentabilidad y la competitividad internacional del agro.
“La presión fiscal asfixiante, inequitativa e injusta ataca la competitividad del sector en cada provincia donde la cadena agroindustrial define el desarrollo, el empleo y la calidad de vida”, subrayaron en el documento. También advirtieron que “no hay más margen para medidas discrecionales de corto alcance”, reclamando reglas claras y previsibilidad para el sector.
Desde el inicio de su mandato, Milei había cosechado la adhesión de gran parte de los productores agropecuarios con un discurso de fuerte impronta liberal, contrario a la intervención estatal y a la carga impositiva sobre el sector. Sin embargo, el ajuste fiscal, la recesión interna y la falta de respuestas concretas al histórico reclamo de eliminación de retenciones están provocando un quiebre en la relación con el campo, un actor clave no solo en términos económicos sino también políticos.
El documento difundido por la Mesa de Enlace refleja no solo el descontento de las cúpulas dirigenciales, sino la presión ascendente de las bases rurales que demandan insistentemente medidas urgentes.