Más allá del crudo: la petroquímica apuesta al conocimiento

Con presencia de numerosos referentes empresariales, académicos y del sector público, el Instituto Petroquímico Argentino (IPA®) celebró este martes una nueva edición de la Jornada de la Industria Petroquímica en el Centro Cultural de la Ciencia (C3), en Buenos Aires, bajo el lema: “El desafío de la competitividad. Cómo impulsar una industria petroquímica más eficiente, moderna y resiliente”.

Durante la apertura, el presidente de la Jornada, Guillermo Petracci —director de Unipar Argentina—, propuso una mirada de largo plazo: “Las oportunidades para nuestro sector requieren que cambiemos el enfoque. Necesitamos renovar nuestra actitud frente a los desafíos y asumir el protagonismo que el momento exige”.

El encuentro, que reunió a especialistas del país y la región, abordó temas estratégicos para la transformación de la industria: desde los condicionantes macroeconómicos hasta la aplicación de inteligencia artificial, el impacto del cambio climático y la necesidad de recursos humanos calificados.

Competitividad en contexto global
El primer panel, “Claves Económicas para una Industria Competitiva”, analizó cómo la estabilidad macroeconómica, el acceso a materias primas baratas —como el gas de Vaca Muerta— y la modernización de normas e infraestructura son esenciales para el crecimiento del sector. Diego Coatz (UIA) y Pablo Giorgi (OPIS - Dow Jones) coincidieron en que Argentina tiene ventajas estructurales, pero requiere políticas activas para aprovecharlas.

La inteligencia artificial ya es parte de la operación
En el segundo panel, representantes de YPF Química y YPF S.A. presentaron casos reales de aplicación de IA para la mejora de procesos. Herramientas como Gema (entrenamiento virtual) y Optimax (optimización operativa en tiempo real) demostraron cómo la tecnología ya transforma la industria, con impacto directo en productividad y seguridad. “El cambio tecnológico no es solo digital, es cultural”, afirmaron.

Cambio climático: un riesgo que ya afecta
El tercer bloque, sobre Resiliencia Climática, advirtió que el impacto del cambio climático sobre la infraestructura ya es tangible. Inés Camilloni (UBA–CONICET) y Juan Pablo Sitá señalaron que las empresas deben incluir la adaptación climática en sus planes de continuidad operativa. Desde análisis de riesgos locales hasta seguros ambientales, la planificación ante eventos extremos se vuelve central.

Innovación desde la ciencia nacional
En el panel de ciencia y tecnología, Darío Genua (Secretaría de Innovación) y Daniel Salamone (CONICET) destacaron la necesidad de articular conocimiento científico con desarrollo industrial. “La petroquímica atraviesa todas las cadenas estratégicas del país”, dijo Genua. Para Salamone, “el conocimiento debe ser motor real del crecimiento y la transformación productiva”.

Materias primas y oportunidad histórica
El potencial del gas no convencional fue el centro del panel cinco. Expositores de TGS, Braskem, PetroCuyo y otras empresas coincidieron en que Vaca Muerta representa una ventana histórica que exige decisiones audaces. Infraestructura, logística y alianzas regionales serán clave para agregar valor a nivel local y competir globalmente.

Sostenibilidad como ventaja competitiva
El último bloque temático estuvo dedicado a la sostenibilidad. Pablo Leidi (Sustenomics) y Sebastián Bigorito (CEADS) subrayaron que ya no se trata de una moda o demanda externa: hoy, la sostenibilidad es condición para acceder a financiamiento, mercados y reputación. Bigorito llamó a “profesionalizar la gestión ambiental” y pidió una transición energética pragmática y realista.

Voces desde el liderazgo
La jornada cerró con un panel de CEOs que incluyó a representantes de Unipar, Compañía MEGA, PetroCuyo, Profertil y Dow Latin America. Todos coincidieron en que el futuro de la industria depende de liderazgos comprometidos con la eficiencia operativa, la transformación digital y una mirada estratégica del desarrollo sostenible.

La presidenta del IPA®, María Florencia Rodríguez Mandrini, clausuró el evento destacando que “la competitividad ya no se mide solo por eficiencia operativa, sino también por sostenibilidad, innovación, colaboración y visión de largo plazo”. Por tercer año consecutivo, el evento fue certificado como “carbono neutro”, con el monitoreo de Cyclus, reafirmando el compromiso del sector con una transición sostenible.