Los intendentes, al centro de la estrategia: De la Torre busca redefinir el peso territorial en la elección bonaerense

En medio del complejo reordenamiento del mapa político bonaerense de cara a las elecciones provinciales de septiembre, el senador Joaquín De la Torre, actualmente parte del monobloque Derecha Popular, sorprendió con una propuesta estratégica que revela tanto su mirada del escenario electoral como sus movimientos hacia una tercera vía peronista alternativa. En declaraciones televisivas, sugirió que las listas de legisladores provinciales deberían ser encabezadas por “intendentes prestigiosos” de cada sección electoral.

La propuesta de De la Torre no es menor. Llega en un momento en que el legislador se muestra cada vez más distanciado de La Libertad Avanza y busca consolidar una nueva construcción política junto a dirigentes que también se apartaron del oficialismo provincial y nacional, como Julio Zamora (Tigre) y Fernando Gray (Esteban Echeverría). Dos intendentes que, en los hechos, encarnan el perfil al que el propio De la Torre aludió.

La lógica del desdoblamiento electoral —con votaciones por secciones electorales y con una boleta separada para los jefes comunales— convierte a los intendentes en piezas clave para la tracción del voto. “La elección de la Provincia tiene algunas cosas diferentes”, explicó De la Torre en una entrevista con el programa Sentido Común del Canal Somos. “Tiene una boleta antes, que es la de los intendentes, que son claramente los que se van a preocupar porque la gente vaya a votar”, afirmó, reforzando la importancia del anclaje territorial de estos dirigentes.

Pero sus palabras también rebotaron en clave local. En los pasillos de San Miguel, ya circula la versión de que Jaime Méndez —actual intendente y aliado de De la Torre— podría encabezar una boleta seccional para el Senado provincial. Un gesto que confirmaría la estrategia sugerida por el senador y al mismo tiempo reforzaría su peso político en un eventual nuevo armado peronista no alineado ni con el kirchnerismo ni con el libertarismo.

¿Una tercera posición bonaerense?
El contexto en que se enmarca esta propuesta es aún más revelador. De la Torre viene participando de conversaciones con sectores que buscan configurar una tercera vía en la provincia de Buenos Aires, por fuera del oficialismo de Axel Kicillof y de la oposición libertaria de Javier Milei. Se trata de una constelación todavía en formación, que aspira a nuclear a intendentes vecinalistas del interior —como Guillermo Britos de Chivilcoy—, figuras del radicalismo desencantadas con el rumbo nacional, y hasta al propio Facundo Manes.

Esta semana, la posible consolidación de ese espacio tendrá un nuevo gesto político con la visita del cordobés Juan Schiaretti —referente clave del peronismo federal— al conurbano bonaerense, más precisamente a la Universidad de Morón. Una postal que busca sumar densidad política a un armado que todavía navega en la ambigüedad pero que ya muestra síntomas de vitalidad.

Reacomodamientos en tiempos de fragmentación
La sugerencia de De la Torre, por tanto, no es solo una recomendación técnica de campaña. Es también una definición política que pone el foco en la territorialidad, en la gestión concreta y en el peso propio de los intendentes como figuras con respaldo real. En tiempos de creciente fragmentación del sistema de partidos, apostar por liderazgos locales consolidados puede ser tanto una estrategia electoral como una forma de diferenciarse de las construcciones más volátiles y centralizadas.

A medida que se acerque el cierre de listas, el escenario bonaerense se moverá cada vez más rápido. La incógnita es si este posible nuevo espacio logrará articularse con la solidez suficiente para ser competitivo, o si sus integrantes terminarán replegados en sus propios distritos.