Montenegro oculta los datos del turismo en Mar del Plata y muestra solo lo que le conviene

En Mar del Plata, el turismo atraviesa una caída sostenida que el gobierno municipal intenta maquillar a través de una estrategia comunicacional selectiva: difunde solo los datos que pueden presentar una imagen positiva, mientras oculta las estadísticas completas que reflejarían con mayor claridad la crisis que afecta a una de las principales actividades económicas de la ciudad.

Desde hace más de un año, el Ente Municipal de Turismo y Cultura (Emturyc) se niega sistemáticamente a brindar acceso a las estadísticas completas solicitadas por Qué digital, marcando un giro respecto de la política habitual del municipio, que hasta entonces publicaba mensualmente las cifras de arribos, incluso en temporada baja.

Un ejemplo reciente de esta práctica se dio en abril, cuando el intendente Guillermo Montenegro celebró en sus redes sociales la llegada de 602.551 turistas, un 17,2% más que en el mismo mes de 2024. Sin embargo, omitió aclarar que este aumento se explica por un factor coyuntural: en 2025, Semana Santa cayó en abril, mientras que en 2024 los feriados fueron en marzo. Al comparar con otros años en los que el feriado religioso también ocurrió en abril, la cifra de 2025 es notablemente menor: en 2023 se registraron 693.325 turistas y en 2022 fueron 663.065. Solo en abril de 2021, en plena salida de la cuarentena, hubo menos visitantes que este año.

Este manejo discrecional de la información no es un hecho aislado. Durante la temporada de verano, el gobierno solo comunicó oficialmente los datos de enero: 1.377.288 visitantes, un 2% menos que en enero de 2024, cuando ya se había registrado una caída del 6% en relación a 2023. Nuevamente, no se difundieron los datos completos de toda la temporada, a pesar de reiteradas consultas de este medio.

En enero, ante un pedido por los datos de diciembre de 2024, la respuesta oficial fue: “No están disponibles las estadísticas, pero podemos ofrecerte, en caso de que les sirva, coordinar una entrevista con Bernardo Martín”, presidente del Emturyc. Las consultas posteriores realizadas a Martín durante marzo y abril, incluso luego de que Montenegro hiciera públicas nuevas cifras en sus redes, tampoco obtuvieron respuesta.

El 3 de mayo, el intendente publicó que en los primeros cuatro meses de 2025 llegaron 3.839.299 turistas, lo que representa un 1,8% menos que en el mismo período de 2024. En lugar de asumir la caída, celebró que la baja se desaceleró respecto del primer trimestre, cuando la disminución fue del 3,3%.

A esto se suma el cambio de lógica comunicacional del municipio, que abandonó su sitio web oficial como canal de actualización de estadísticas desde 2022. En su lugar, las redes sociales del intendente se transformaron en la única vía para conocer parcialmente los números, pero solo aquellos que pueden servir para reforzar un discurso alineado al gobierno nacional de Javier Milei, incluso relativizando las caídas. Durante el fin de semana largo del 24 de marzo, por ejemplo, Montenegro llegó a celebrar que “haya menos turismo nacional y popular”, argumentando que los visitantes que llegaban tenían “mayor poder adquisitivo”.

Esta política de opacidad informativa no solo impide una evaluación precisa de la situación del turismo, sino que también profundiza la falta de transparencia de una gestión que evita rendir cuentas sobre una industria clave para la economía marplatense, y que, como la pesca, atraviesa una crisis estructural que no puede ocultarse con publicaciones en redes sociales.