Arrecifes celebró la 12ª Edición del Gran Premio “Cuna de Campeones” con énfasis solidario

Organizado por la Asociación Corredores Turismo Standard Histórico, la competencia se llevó a cabo en el Circuito Costanero “Daniel Alberti” y contempló las 9ª y 10ª fechas del certamen de autos clásicos.

El evento contó con la presencia del intendente de Arrecifes, Fernando Bouvier, y un grupo de funcionarios municipales, quienes apoyaron la celebración. Esta edición del Gran Premio se destacó por su enfoque solidario, ya que se invitó a 35 niños del barrio El Palmar, quienes asisten al merendero “Meriendas Compartidas”. A través de esta iniciativa, los menores tuvieron la oportunidad de disfrutar de vueltas en los autos en competencia, así como de recibir juguetes, elementos deportivos y kits escolares, facilitando un espacio de diversión y aprendizaje.

El festival que acompañó al evento principal se convirtió en un punto de encuentro entre los participantes y la comunidad. Los niños recibieron no solo una merienda, sino también la alegría de vivir una experiencia única al volante de autos que han marcado la historia del automovilismo argentino. Esta actividad se enmarca dentro de los esfuerzos de la organización por estrechar vínculos con la comunidad local trabajando en pos del bienestar de sus integrantes.

El apodo "Cuna de Campeones" que se le atribuye a Arrecifes tiene su origen en 1939, cuando el periodista Horacio Bancalari referenció a la ciudad tras el triunfo del piloto Ángel Lo Valvo en el Gran Premio Internacional del Sur. Desde entonces, varios pilotos locales han dejado su huella en el automovilismo nacional, consolidando la reputación de la localidad en este ámbito.

La 12ª edición del Gran Premio “Cuna de Campeones” no solo se enmarca en la celebración de los autos clásicos, sino que también refuerza el compromiso con la comunidad. La colaboración de la municipalidad y la Asociación Corredores Turismo Standard Histórico subrayan la intención de utilizar el evento como una plataforma para apoyar a quienes más lo necesitan, en este caso a niños del barrio El Palmar.

Con una combinación de velocidad, competencia y solidaridad, el Gran Premio continúa su legado en Arrecifes, resaltando el espíritu comunitario y el amor por el automovilismo que caracteriza a esta ciudad.