
Ghi habló sobre la caída de la sesión para tratar el endeudamiento de la provincia de Buenos Aires y remarcó la necesidad de discutir la distribución de los recursos coparticipables. Aseguró que hay que pensar en una fórmula en la que nadie pierda, pero que Buenos Aires es “la provincia que más necesita, no solo la que más aporta”. “Kicillof no está pensando en quitarle nada que alguna provincia ya esté recibiendo”, indicó en declaraciones a medios nacionales.
Asimismo, el intendente analizó este nuevo escenario político: "Creo que es un desafío que nos plantea la democracia, porque ha elegido proyectos de gestión que son a todas luces contrastantes, en términos provinciales, en el caso de la Provincia de Buenos Aires, con las autoridades que han resultado electas fruto del balotaje". En esa misma dirección expresó: "Eso nos plantea un desafío de convivencia democrática, a partir del cual tendremos que desarrollar las habilidades que nos permitan, por un lado, honrar los compromisos con quienes nos votaron, y a su vez tener la capacidad de generar acuerdos, consenso, convivencia, en este caso con el Gobierno Nacional, que viene a plantear una agenda que tiene varios puntos que son opuestos a lo que nosotros entendemos que es bueno para el país. Pero no quiero abrir mucho más ningún juicio de valor porque no han asumido, hasta ahora han sido definiciones o trascendidos que, una vez que efectivamente se plasmen en políticas públicas, bueno, empezará un nuevo capítulo".
"El 10 de diciembre empieza el partido, hay que ser prudente, a todos los que estamos en ejercicio de función nos puso la democracia y eso implica el respeto a la legitimidad que cada uno tiene. Pero sí es una escena desafiante, y si servirá para algo o no servirá, lo dirá la historia", enfatizó con miras a lo que se viene en donde su espacio será la oposición.
Lucas Ghi también apuntó a la necesidad de rediscutir sobre los fondos de coparticipación, teniendo en cuenta la fallida sesión de este miércoles en la legislatura bonaerense: "Creo que se impone una vez más la necesidad de discutir qué masa de los recursos coparticipables le llegan a Buenos Aires, a la Provincia, dentro de los números que vos bien compartías en términos de densidad poblacional, de presencia productiva, de aporte que le hace la provincia al PBI. Recibimos solo el 22% y aportamos alrededor del 37%. Si a ese 22% se le suman algunos otros fondos que tienen fuerza de ley, como es el fondo del conurbano, o el fondo que se creó hace tres años en el marco de la revuelta con la policía, ese 22% se transforma en 25 puntos y siguen estando muy lejos de lo que entendemos debería ser un número necesario para el desarrollo con equidad de una provincia tan compleja como la provincia de Buenos Aires", analizó en profundidad. "Esto, si hacemos una historicidad, se remonta a 1988, fundamentalmente cuando Alfonsín decide resignar seis puntos de la coparticipación y distribuirlo entre las provincias del norte para contener lo que pareciera que iba a ser un fenómeno en ascenso, que era el arribo de una buena cantidad de compatriotas de aquellas provincias a buscar mejor suerte a la capital y al conurbano, y para eso le asigna más recursos a esas provincias para fomentar el desarrollo. Evidentemente, mucho o poco de eso sucedió porque el conurbano siguió creciendo y la Provincia perdió su incidencia en la coparticipación. Yo creo que es necesario discutirlo seriamente porque también es la provincia que más necesita, no solo la que más aporta", agregó.