
El referente de Somos Luján, Cristian Alberti, habló sobre el basural a cielo abierto de Luján, que tiene más de 50 años sobre un predio de 20 hectáreas con basura enterrada a más de 25 metros de profundidad donde nunca tuvo algún tipo tratamiento. Siempre fue depósito de todo tipo de residuos, domiciliarios, comerciales e inclusive industriales.
“Los vecinos que vienen reclamando son incontables. Muchos de ellos hoy no están. Pero su lucha no se perdió, sino sigue cada día más vigente que nunca”, manifestó Alberti. Y reveló que en materia de Salud: “Se evidencian a lo largo de los años graves problemas de índole respiratoria, escoriaciones y lesiones de piel, y hasta desnutrición. No nos olvidemos que hay mucha gente que vive del basural y es su única fuente de ingresos”.
El vertedero está ubicado en un lugar con 5 barrios donde los vecinos sufren todas las consecuencias del humo, olores, roedores y se presume la contaminación de las napas de agua Subterránea, y un cuerpo de agua de superficie que pasa por la zona. Además, hay emprendimientos de barrios cerrados y country que sufren las consecuencias, sumado a una escuela ubicada a menos de 3 cuadras del basural.
El basural debe ser cerrado con un proceso de saneamiento y remediación, es decir a través de un tratamiento adecuado de los pasivos ambientales.
Consultado por el anuncio del gobernador Kicillof de cerrar 10 de los más de 80 basurales que existen en el distrito, Alberti sostuvo: “Todo anuncio que involucre el bienestar y la mejora de la calidad de vida de los vecinos en su conjunto siempre tendrá un recepción positiva por la mayor parte de la Ciudad”.
De todos modos, el dirigente recordó que “los vecinos desde hace décadas vienen padeciendo este flagelo de la contaminación necesitan una respuesta concreta y contundente. Y que la remediación del basural se haga lo más pronto posible”.
Desde Somos Luján recalcan que el proceso de construcción de una planta de tratamiento debe ser sostenible e incluir los aspectos, ambientales, sociales y económicos. Además debe contar con focalización ciudadana en forma permanente que asegure antes, durante y después de la construcción los monitoreos ambientales y las acciones correspondientes de acuerdo a los resultados. Con información pública y accesible a toda la población.
“Aun así todavía no está muy claro cómo se va a sanear correctamente el predio. Si se está efectuando una correcta impermeabilizacion de los suelos para que no se sigan contaminando las napas, entre otras preocupaciones de suma importancia”, señaló.
Y remarcó que “faltó transparencia en la consulta pública. Nunca se convocó realmente a los vecinos e instituciones de la ciudad a participar. Por lo cual si bien apoyamos la medida, encendemos las pautas de alarma para que cada proceso que se haga esté en concordancia con los más estrictos niveles de seguridad ambiental. Y por sobre todo para que los vecinos sepan la verdad”.
Por último, Alberti comentó que el actual intendente de la Ciudad, Leonardo Boto, “tuvo la acertada decisión de ponerse al frente de este flagelo. Supo escuchar el reclamo popular y encauzar una medida para solucionarlo, pero no fue el único. Uno de los pioneros en la lucha por la erradicación del basural y de las industrias contaminantes de la ciudad fue el diputado mandato cumplido Juan Carlos Juárez”.