
Julio Ramón Ribeyro, quien hoy cumpliría 93 años, escribió "Los gallinazos sin plumas" en 1955. Una obra que se volvió famosa al capturar la dura realidad de la vida en los barrios marginales peruanos. Con sus cuentos, brindó una poderosa crítica social a través de la lente de la fantasía.
Ribeyro y sus tres hermanos tuvieron una infancia de clase media hasta que la prematura muerte de su padre dejó a la familia en la pobreza.
Julio Ramón Ribeyro pasó a estudiar artes y derecho en la Pontificia Universidad Católica del Perú antes de publicar su primer cuento, La vida gris, en la revista Correo Bolivariano en 1948. Unos años más tarde, el Instituto de Cultura Hispánica le otorgó una beca de periodismo en España.
Luego de escribir Los gallinazos sin plumas, estudió brevemente literatura francesa en la Universidad de la Sorbona antes de abandonar los estudios para trabajar como portero de hotel y trabajador de una fábrica para mantener su escritura.
El Doodle de Google recuerda también que, en 1958, Ribeyro regresó a Perú para convertirse en profesor de la Universidad Nacional de San Cristóbal de Huamanga. Dos años más tarde terminó su primera novela Crónica de San Gabriel. El libro, que explora la vida en una comunidad rural peruana aislada, ganó inmediatamente un premio nacional.
Tras la publicación de su libro, Ribeyro regresó a París, donde trabajó como periodista, traductor y editor en la Agence France Presse durante los siguientes 10 años.
En 1970, Ribeyro se convirtió en asesor cultural peruano y luego en embajador ante la UNESCO. A pesar de su apretada agenda como diplomático, Ribeyro siguió escribiendo. Al final de su carrera, había publicado ocho volúmenes de cuentos y varias novelas, ensayos y obras de teatro. Su obra ha sido traducida a múltiples idiomas.
También, en 1994, Julio Ramón Ribeyro ganó el prestigioso Premio Juan Rulfo de Literatura.
Bajo este marco, la poderosa escritura de Julio Ramón Ribeyro continúa cambiando la percepción que tiene la gente del mundo.