En comunicación con el portal, el director de de Promoción de Masculinidades para la Igualdad de Género del Ministerio de Mujeres Políticas de Género y Diversidad Sexual de la provincia remarcó la importancia de abordar estos temas desde una mirada transversal.
“Definimos los objetivos en dos direcciones claves: Por un lado la importancia de la promoción y prevención, es decir la instalación del tema en los Estados municipales y por el otro trabajar en el fortalecimiento de espacios con varones que ejercen violencia de género”, detalló el funcionario.
De esta manera, explicó que llevaron adelante “capacitaciones a los equipos de trabajo municipales sobre la temática” con el fin de generar “la incorporación de esta mirada de abordaje en políticas de masculinidad”.
“Entendemos a la masculinidad como un factor de riesgo y la necesidad de abordarla, trabajamos esta mirada en espacios de niñeces, de salud, de género”, contó Sánchez y añadió que “tenemos un cuadernillo que está por salir de introducción a la temática y a las diferentes políticas que tienen esta perspectiva”.
Asimismo, destacó que “tuvimos trabajo con varones que ejercen violencia” y celebró “el abordaje integral de la violencia por razones de género articulado con las diferentes mesas locales y direcciones municipales de género”.
“Hicimos la capacitación de sus integrantes y el fortalecimiento despacio que estaban en funcionamiento”, puntualizó el funcionario y aseguró que también realizan “supervisión, asistencia y guías para la derivación e información”.
Estos operativos tienen el objetivo de “en primer lugar proteger a la víctima pero por el otro lado transformar las prácticas violentas desde una manera no punitiva”.
En esa sintonía, el director se refirió a la línea Hablemos donde los varones pueden llamar y generar “un abordaje de la cotidianeidad, para escuchar y para hacer un seguimiento”. “Se trata de la primera escucha de la situación seguida de la derivación correspondiente a otros organismos y se genera el contacto con instituciones locales”.
Por otro lado, resaltó la coordinación con las áreas municipales y sostuvo que había muy pocos espacios de abordaje a las masculinidad en la provincia
“Hoy contamos con 47 espacios que trabajan con varones, se está generando esta red que tiene el objetivo de instalar el tema”, declaró el director y festejó “el vínculo que se generó con las mesas locales en donde se ve la necesidad de trabajar con varones”-
Con respecto a las medidas punitivas como las restricciones y el botón antipánico, Sánchez definió que “entendemos que protegen a las víctimas pero no resuelven la violencia” ya que “generalmente los varones que tienen medida punitiva por otras personas o no las cumplen”.
“Hay que hacer una evaluación del territorio y un seguimiento, para erradicar la violencia por razones de género hay que buscar la transformación de las prácticas”, declaró el funcionario.
“Estamos haciendo un registro para evaluar la situación creando informes y trabajando para sacar estadísticas”, agregó Sánchez y remarcó que “hay que armar un circuito que no estaba con los varones que ejercen violencia en donde se priorice la escucha y el reconocimiento de la violencia y esas prácticas”.
Sobre el eje que mantiene la dirección, Sánchez enfatizó en que su rol es “aportar a la erradicación de la violencia de género desde una mirada necesaria incluyendo el trabajo con varones violentos atravesados por el género jerarquía sexuales y mandatos hegemónicos”.
“Podemos observar que se repiten las modalidades de violencia por lo que es necesario un abordaje integral para la prevención”, dijo el director y contó como ejemplo que se pudo plantear esta perspectiva en otras áreas como los consumos problemáticos donde la mayoría eran varones.
“Debemos generar una dimensión de género en estos temas para reflexionar cómo es que se construyen los mandatos hegemónicos ligados al consumo para después pensar y planificar políticas desde el estado”, añadió.
Con respecto a la relación y articulación con municipios “desde la dirección se trabaja mucho con las mesas locales para efectuar una transversalización del género”. Y sostuvo que “hay una demanda por parte de los espacios y los municipios de tratar estos temas”.
En ese sentido, relató que una de las políticas del Ministerio de las mujeres es el programa comunidades sin violencia que ofrece una financiación a los ejecutivos municipales para equipar los espacios técnicos y que funcionan de una forma interdisciplinaria además de contratar más personal y capacitar al que ya estaba.
“Las expectativas que tenemos como gestión es intentar instalar en los municipios estos equipos y la mirada en la política de género”, indicó Ariel y subrayó: “La masculina es una forma para comenzar a pensar la violencia, es importante abrir estos temas para después abrir otros como la paternidad y las tareas de cuidado”.
Finalmente, el director afirmó que “es un objetivo interesante abordar estos temas para pensar políticas en términos de el cuidado y la desigualdad porque no sólo genera una desigualdad simbólica sino que hay una materialización económica con respecto al uso del tiempo y a las tareas de cuidado”.
“Vemos una feminización de la pobreza con respecto a la tarea de los cuidados que estructuran la desigualdad de género pero esto se produce en base a una masculinización de la riqueza”, concluyó.